Elidio Espinoza, del Movimiento para el Desarrollo, logra adeptos levantando las banderas de la seguridad y honradez, en el entendido que su formación policial es suficiente para combatir la delincuencia y actuar con rectitud. Pese a denuncias, que el candidato califica de una guerra sucia, sigue adelante.
Santa María se muestra como un técnico joven, preparado y correcto que capta simpatías por sus buenas ideas y representar la renovación del partido de la estrella que pasa por una difícil encrucijada, pero confía en el voto escondido y el de los independientes.
Llempén se coloca expectante gracias a una fuerte inversión publicitaria y sus dotes de conducta personal, aunque no contagia muchas ganas de ganar. De hecho el mismo reveló que más le hubiera gustado competir por la presidencia regional.
El “niño terrible” Daniel Salaverry, estuvo en algún momento arriba y de pronto bajó. Luego se mantuvo en un incierto sube y baja. Sus detractores dicen que su temperamento inestable hacen dudar que pueda conducir sin sobresaltos las riendas de la ciudad, aún así no pierde la ilusión de ganar.
¿Y en los distritos?
¿Y en los distritos?
En La Esperanza, predominan: Daniel Marcelo, que va por la tercera elección, el batallador Raúl Álvarez del Apra y Víctor Rodríguez de Restauración Nacional.
En El Provenir, el actual alcalde aprisa Paúl Rodríguez, tiene ventaja, aunque no se descarta al ex burgomaestre Luis Alberto Sánchez de Súmate que quiere volver.
En Víctor Larco, Níls Ruiz de RN, Moisés Arias del PAP y Pocho Torres de FP, buscan destronar al reeleccionista Carlos Vásquez Llamo que se saltó con garrocha las sanciones del JEE por graves infracciones cometidas.
En Florencia de Mora, Wilson Toribio el PAP intenta repetir el plato municipal disputándolo con Ydelso Terrones de Súmate y José Cipriano de Restauración.
Mientras en Laredo el oficialista Miguel Chávez podría ser sacado por la restauradora Blanca Torres o el elidista Diego Bazán.
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