Una persistente y prolongada lluvia -que apareció leve y se fue intensificando de forma intermitente- inundó las calles y avenidas de Trujillo, obligando a los peatones a caminar cubriendo el cuerpo, a los niños a jugar en casa y a los vehículos sortear los charcos de las agua.
La central de radiocomunicaciones de Seguridad Ciudadana no reportó mayores incidentes, salvo un amago de incendió en un horno de una tienda de pollos a la brasa en la avenida Prolongación Unión, que fue controlado con un extintor por los mismos trabajadores del negocio.
Preocupa sin embargo, lo que pueda ocurrir en los barrios y distritos periféricos dada la fragilidad en la construcción de las casas, particularmente los techos que deben ser reforzados con material impermeable.
Entrada la tarde, ya con un poco más de gente y vehículos en la calle, aunque aún con lluvia, los policías de Seguridad Ciudadana continuaban su labor de patrullaje a pie, en motocicletas y camionetas.
La policía municipal ha tenido una ardua labor en los últimos días, de manera especial evitando que los vendedores ambulantes invadan pistas y veredas, en el afán de vender sus productos con ocasión de la Navidad.
A pesar de la constante lluvia los agentes siguen prestando el servicio normal, el cual -se informó- continuará con la misma intensidad pues en estos días se vienen desarrollando diferentes actividades conmemorativas por el 191 aniversario de la independencia de Trujillo y las fiestas de fin de año.
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